
- 13 de agosto de 2025
Los genéricos serán el motor del creciente mercado farmacéutico mexicano
El mercado
farmacéutico de México está valorado en cerca de 20,000 millones de dólares en
2024, según Market Research Company, Reports and Consulting (IMARC); el segundo
más grande de Latinoamérica, sólo detrás de Brasil. Y el sector no solo crece a
un ritmo constante, sino que proyecta una expansión anual superior al 10% entre
2024 y 2030, impulsado por factores como el envejecimiento poblacional, la
demanda de tratamientos asequibles y reformas regulatorias recientes.
El
crecimiento del mercado farmacéutico mexicano, que según INEGI, alcanzó ventas
totales de 536,530 millones de pesos en 2022, se ha acelerado en los últimos
años. Para 2025, se estima un avance promedio anual del 10%, con proyecciones
que lo llevarán a 38.5 mil millones de dólares para 2033. Este dinamismo se
divide en segmentos clave: el mercado privado representa el 70% en valores,
mientras que el público cubre el 30%, aunque en unidades el público domina con
el 80%. Esta dualidad refleja un sistema fragmentado, donde el privado actúa
como ´válvula de escape´ ante reacomodos institucionales que no terminan de
asentarse, desde el Seguro Popular hasta el IMSS-Bienestar.
Los
genéricos son el corazón de este crecimiento accesible. A nivel global el
mercado de medicamentos genéricos se valora en 413.6 mil millones de dólares en
2024. El impacto en los sistemas de salud es profundo: al ingresar al mercado,
en 3 a 4 años los precios se reducen hasta la mitad, beneficiando a mayor
población que las opciones de innovación cuando tienen aún la exclusividad de
venta que da la protección de patente. Este espíritu de los genéricos es noble
porque fomenta la equidad sanitaria y expande el acceso a innovaciones una vez
que expiran las patentes, equilibrando el respeto a la propiedad intelectual
con el derecho público a tratamientos asequibles.
Pero en
México persisten desafíos regulatorios que frenan ese potencial. El llamado
linkage entre la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios
(Cofepris) y el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) ha sido un
cuello de botella histórico, que la actual administración se impone remediar.
El retraso histórico en aprobaciones impide que los genéricos salgan al mercado
inmediatamente después de la expiración de una patente, y es un pendiente
regulatorio crucial. Acciones de titulares de patentes para extender
exclusividades agravan el problema.
En marzo de
este 2025 salió un nuevo decreto clarificando directrices del sistema de
linkage, que busca mejorar la coordinación para genéricos y biosimilares. Dicha
reforma, junto con una mejor gestión regulatoria, han acelerado los registros,
y la propia industria ya lo percibe.
Eso tiene
que ir en favor de los pacientes, pues los genéricos impulsan no solo ahorros
–crucial en un país como México con alta prevalencia de enfermedades crónicas–,
sino también la competencia. En la producción hay creciente competencia, pero
también en la comercialización. Las farmacias en México se componen por
diversidad de jugadores –cadenas, independientes y consultorios adyacentes a
farmacias (CAFs)– lo que, a decir de especialistas, autorregula el sector,
ofreciendo opciones para todos los bolsillos. En particular, los cerca de
18,000 CAFs, que hoy cubren más atención primaria que el sistema público, se
abastecen mayoritariamente de genéricos, contribuyendo al crecimiento del
privado.
Si se llega
a concretar lo establecido en el Plan México de la presidenta Claudia
Sheinbaum, para 2026 se supone que las compras públicas priorizarán
laboratorios nacionales, potenciando genéricos locales. Siendo optimistas, con
un crecimiento proyectado del 7.1% global en farmacéuticos hasta 2031, hay
quien estima que México podría liderar en Latinoamérica si resuelve las
barreras restantes. Los genéricos no son solo una alternativa barata; son el
puente hacia una salud inclusiva en un mercado en ascenso. Para maximizar su
impacto, urge fortalecer un linkage adecuado y fomentar inversiones en
producción local, donde existen varias grandes farmacéuticas con una posición
sólida que están dispuestas a entrarle, como se anunció en la conferencia
presidencial hace unas semanas.