Rocephin es un antibiótico de más de 20 años de presencia en el mercado mexicano, prácticamente sin innovaciones y desde hace ya varios años sin publicaciones de nuevos estudios acerca de Ceftriaxona, enfrenta una gran proliferación de copias con precios más bajos y barreras de uso por la percepción de su vía de administración: inyectable y por lo tanto, dolorosa. ¿Qué más podríamos decir con un medicamento maduro de amplio conocimiento en el consultorio? Había que envolver a la marca con valores de servicio y calidad: Desde la propia concepción de la campaña “Su mano derecha” localizamos las oportunidades para seguir hablando de forma relevante de los beneficios de Rocephin, colocamos la idea como un eje que debía extenderse a cada pequeño esfuerzo que estuviera relacionado con la marca, el vínculo con el médico tendría que rebasar lo científico y colocarse en un ámbito emocional a través del reconocimiento del trabajo del médico, con un tono cálido y con un posicionamiento solidario en la consulta. La renovación de la imagen de la marca se basó en el concepto de “Su mano derecha” que comunicaba el servicio y liderazgo de Rocephin en todos los puntos de contacto posibles: Desde un evento de lanzamiento para el médico con sus familias para acercarlo a la campaña con la que estará en contacto durante todo 2007, programas de bienvenida al paciente que el médico le proporcionaría para mantener la adherencia y fortalecer el uso de inyectables, un servicio en internet con información tanto para pacientes como para médicos, materiales que en su diseño buscan ser más atractivos, dándole a Rocephin un sentido de renovación con un concepto sólido y congruente con lo que el médico percibe de la marca, es lo que ha llevado a esta campaña al éxito en cada uno de los esfuerzos que el representante médico hace con las herramientas que “Su mano derecha” le proporciona.